Gesto.

A

 los ascendidos.

Por qué hiciste ese gesto nocturno, solo viento frío.
Supe que eras la muerte, víspera de abejas de cemento.
sin todo lo que engorda, a esas nubes de queso.
 en ti vi como surgen cabezas de lodo en la tierra helada.
En ese sendero amargo y sin luz, por donde guardaron las armas.
los verdugos del presidente.

He aquí mi primer hijo esta por encima del gesto ridículo de nacer. 
  Por encima del amor y las emociones terrenales.
En este vacío de lastimas,
 Y te reíste de mi al ver como había nacido del Universo.
Al  llegar a este nivel bajo.
Tan inmenso era el frió en el viaje, como era esa música del oscuro.
Jamas seré yo el que haga caer en tu cuerpo muerto,
Antes que las células desaparezcan sobre la harina de dios.
Y me diste hueso y carne, 
Y me dijiste: "ellos no tendrán miedo, porque están muertos en la vida"
Tú que estas mas allá de ultimo suspiro extra-terrenal.
Con la vida hice una poesía de tu gesto.






-García Estrella

En su casa.

Lucen vacías y negras las teclas de la maquina.
En su crepúsculo psicológico nos pinta de rojo. 
Bajo los finos ojos de su rostro, dibuja una sonrisa.
Solo un aire de nostalgia se pasea por su boca.
En su casa vacía donde se mece su cabello negro.
Palpita el pasado, bajo mi mirada de lumen.
Y Suave tecleo sobre la maquina, para desgranar su deseo.
Para limpiar el estanque de sus moléculas luminosas.
Por que me enternece esa canción incierta, 
Mientras ella llora en la ventana,
Mientras va cerrando la cortina, Mientras mira 
Las tibas del jardín solemne de su cuerpo.


-García Estrella.

Todos los Jueves.

Aquí de vista a la montaña del norte.
Como buen chico fui a comprar cervezas.
En su lado oscuro, el amor lo había encontrado.
A la plaza que el césped dibuje un monje ralo.
Todos están correctos con sus teorías.
Atizando con  mucha dignidad los tratados.
Tentando este diablo con mi canción.
"Cuando vendrán de Sion, por este moribundo"
   Un pinche burges con botones de oro y panza nórdica.
Regreso a casa, y crucificar las rodillas de mi halo.
La banda de guerra en medio del jardín.
Burgueses jadeantes que ahogan todos los jueves sus calores.
 Mujeres al volante que parecen anuncios de Coca Cola.
Deberían de colgar a todo notario publico en las plazas del centro.
Para encontrar nuestra paz de la mente, de mi cuerpo arenoso.
Un lomo orundo y fofo se asoma en las religiones,
Es la ignorancia de dios por los crines de las masas.
Mientras enamorados por el son de Lateralus,
por el sonido del trombón.
Legión de silencios por los senderos.
Ingenuos los poetas husmeando una rosa en la oscuridad.
"Cuando vendrán de Sion, riéndose de mi"
Yo no exhalo fuerte pero miro la carne, 
de las alegres chicas, hechas un desastre, como un estudiante.
Ellos con sus manos quebradas,
Con sus ojos cuajados de ideas indiscretas.
Para el molde, mi color es el pavimento.
 De una espalda de diosa, mi curva en el hombro.
sobrecogedora malicia en las noches.
Pronto de converse y medias manchadas de pintura.
Un acrílico para mi pared de lamentos.
Reconstruyo los cuerpos y ardo en fiebres invernales.



-García Estrella.

Te vamos a sacar el plug.

Sobre todo tú pasas una tapa inferior.

Te arrastraste lejos de mí,

Mantuviste tu bodega lejos de aquí.

Solo librarme de esta piel,

Levitando el poema

y mi mano Stinkfist dentro de una cueva de tesoros.

Vamos a sacar tu plug.

Y tendremos a la deriva mi piel descarnada.

Mi esqueleto eléctrico lo tiraré por la borda.

Todo lo que abandonas,

Tu rostro trasatlántico, y tus uñas mas limpias que el demonio.

soy ese que lava la libertad.

Te vamos a sacar el plug.

Oculto en sus palabras, detrás de sus ojos orientales.

Limpio mi columna vertebral,

Voy a ser que no creas en los medios.

A distancia despierto para mantener mi alma.

Junto a tu mundo frió y feo.

En la cueva de tesoros, Sobrio.

Nada parece penetrar en su altar.

Por cada pulgada de memoria cargada de metal.

Hasta que dos y dos son veintidós ángeles esperando a que los liberé.

Me llevó a donde todo comenzó, sin el rimen de tus ojos.

Me muevo por encima de la comunicación.

Me muevo por donde va el sonido, por los cadáveres de los arios.

Me tomo tiempo darme cuenta que tengo la luz,

                                      que me llevara a casa.

-García Estrella.

En la soledad me mantengo a salvo mientras estoy en casa.

Me mantengo lejos de las vertientes de tu malicias.
Mantenme encerrado, lejos del lucero matinal.
Cierra todas las ventanas del cielo.
Hoy me voy a encontrar a mi mismo.
Mi tiempo de envejecer, es una melodía lodosa.
Sabré la razón del porque?
En la soledad me mantengo a salvo mientras estoy en casa.
Tengo una razón,
Hasta que me haya ido dentro de tu deseo.
Dentro de mi mismo.
Dentro de este pequeño universo silencioso.
Y cuando muera, mi alma se elevará por encima de la política mundial.
Entierra mi cuerpo en el humo.
 ese que se disipa con la salida del sol.
Que descanse en la dichosa niebla. 
En la soledad me mantengo a salvo mientras estoy en casa.
He tomado el 1600, desde que  tomé la pulpa.
Zona horaria, jamas hubo lugar como este hogar.

Por que la venganza es vencida, hoy me encontré a mi mismo.
Por debajo de mi cerebro, estoy sobrecargado de odio.
Que se acabe el tiempo, siempre has sido un hombre sabio.
Que se creía ser duro.
Las masas son unos cobardes sin columna vertebral.
He agregado un poco de vino a la comida, 
Esta noche en casa, pero me gusta mas cuando gritas.
En la soledad me mantengo a salvo mientras estoy en casa.


-García Estrella.